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Una guía de ciudades muy subestimadas: Bolonia

martes, 7 de noviembre de 2017

De todas las cosas que piensas cuando alguien te menciona Italia, seguramente la ciudad de Bolonia no cruza tu mente hasta pensar en la comida boloñesa, especialmente el Spaghetti que, para ser honestos, ni siquiera existe en la forma en la que normalmente pensamos. De la misma manera, no viene a la mente de la mayoría de los viajeros que deciden visitar Italia. A 3 horas de Roma y a tan sólo 30 minutos de Florencia, e incontables vuelos a su aeropuerto internacional desde toda Europa, vamos a darte las excusas perfectas para visitar la ciudad más subestimada de Italia.

Bueno, sin contar que en Bolonia no te encontrarás rodeado de multitudes de turistas y tratando de escapar de las trampas de turistas, podemos reducir a 2 razones por las cuales la ciudad posee un carácter especial y único y visitarla es algo que tienes que hacer.

La cocina local y la comida son tremendamente espectaculares.

Entonces, primero lo primero y tenemos que dejar muy claro que Bolonia es una ciudad para comer mucho y ¡comer bien! El apodo de La Grassa no tiene ni un solo gramo de ironía, Bolonia lo recibe y le hace honor con mucho gusto. En la región en la que se encuentra, Emilia-Romaña, la producción de comida abunda; y varios productos de fama mundial provienen de la localidad. Entre ellos: queso parmigiano-reggiano, vinagre balsámico, prosciutto, etc.

Sí, claro que los productos que puedes conseguir en la región son excelentes, pero lo que hace la cocina boloñesa realmente espectacular son sus recetas. Y, con tal de conseguirte la mejor información, hemos atormentado durante días a nuestros compañeros del equipo de volo-in-ritardo.it hasta que nos han soltado las mejores recomendaciones de platos de la región, aprovéchalos puesto que creemos que son secretos de Estado italianos:

- Gnocco Fritto, acompañado de los mejores cortes fríos que puedas encontrar.

- Crescione e Piadina

- Crescentine Bolognese con embutidos

- Mortadella

- Tagliatelle alla Bolognese

Acompañar la comida, especialmente si es pasta, con una copa de vino Sangiovense es una excelente idea. Los restaurantes abundan en el centro de la ciudad y su calidad es indiscutible, pero para una experiencia un poco más inmersiva alrededor de la cultura del comer de Bolonia te recomendamos visitar cualquiera de los tres mercados dentro de la ciudad:

Mercato della Terra: un mercado al aire abierto en donde los locales pueden hacer sus compras del día al día.

Mercato di Mezzo: cerca de la Plaza Maggiore, es el más famoso por lo que puede sentirse más como una atracción turística y los precios pueden ser un poco más altos. Está cerrado los domingos.

Mercado delle Erbe, la mejor opción puesto que no solamente puedes comprar comestibles sino pasar la tarde y la noche probando todo lo que el mercado tiene por ofrecer.

Una auténtica experiencia de la cultura italiana.

La segunda razón por la cual tienes que viajar a Bolonia es que es una ciudad con historia pero relajada y muy accesible. No sólo es una de las ciudades históricas mejor conservadas de Europa, también tiene el segundo casco medieval más grande del continente. Bolonia surgió como un centro económico y cultural bastante importante durante el Renacimiento, por la cual la cultura, la arquitectura y el arte no son escasos. Muy importante también es su Universidad, fundada en 1088 se cree que es la más vieja en el mundo occidental. También conocida como La Rossa, por sus techos de terracotta, pero también por su relación histórica con ser un bastión de las ideas socialistas y progresistas italianas, Bolonia posee una mezcla de historia y contemporaneidad que no encuentras en un ninguna otra ciudad italiana y su relación con la historia del país como tal es innegable. La atmósfera relajada que inyectan los estudiantes, el amor por la comida y cocina local y ese sentimiento de que millones de cosas ya han pasado en la ciudad pero aún faltan millones de cosas por suceder, hacen de Bolonia una ciudad que realmente te deja perplejo y encantado por su magia y belleza.

Encuentra tu camino desde la Plaza Maggiore, y, luego de un almuerzo delicioso, asienta la comida caminando en dirección hacia las Dos Torres y dejándote impresionar por ésta espléndida y auténtica experiencia de la cultura italiana.